En la «casa de la muerte», ubicada en las tinieblas de Villa Juana, hubo una fallecida y dos heridas en un juego de niñas.
El ángel de la muerte batió allí sus alas, con tanta maldad que destruyó una columna y una pared sobre unas niñas que se entretenían con toda su inocencia.
Fue en la noche del sábado. Cinco nenas jugaban amarrando una soga en la columna y esta no soportó el peso de la juerga, se vino abajo y sepultó a una de ellas. Dos resultaron heridas y las otras se salvaron de milagro.
Serán las navidades más tristes para la señora Farah Brito, que perdió su hija de 12 años apenas. Dice que estaba trabajando cuando sonó la desgracia que le arrebató a su hija.
La casa está abandonada, pero sus dueños tienen un empleado atendiéndola. Dalki Victoria es otra madre que también lo lamenta. Una de sus hijas resultó herida y las otras dos salieron ilesas.