Yordy Cabrera está metido en un lío feo por la trágica muerte del prospecto Ismael Ureña Pérez, y en un video se confiesa inocente, dice que no tuvo nada que ver con el lamentable deceso, y niega que esté haciendo amenazas contra la familia de la víctima.
«Lamento mucho lo sucedido, porque yo soy padre, tengo mi familia, mis hijos y yo sé; tal vez no sienta el dolor que se siente perder un hijo, que yo sé que es muy grande; sí sé el dolor que es perder un ser querido.»
«Pero yo no tengo nada en lo absoluto que ver con esa pérdida, ni de lo que pasó, lamentable, con ese niño», manifiesta.
Dice que tiene una carrera inmaculada, ya que nunca ha usado anabólicos ni sustancias veterinarias, ni para él ni para otros.
Pide que investiguen su carrera en Grandes Ligas y en el béisbol profesional para que se compruebe que no ha tenido nunca que ver son ese tipo de sustancias.
Apunta que durante 14 años en la pelota profesional, nunca tuvo problemas y siempre salió bien de todas las pruebas que le hicieron, sin dar «positivo a nada, porque nunca he usado nada».
Señala que en el 2018 abrió su academia para ayudar a los prospectos y educarlos; y que allí se hacen reuniones de padres y se habla todo con mucha frecuencia.
Indica que a sus jugadores se les practicó el dopaje y salieron limpios, lo que les permitió participar en un evento en el extranjero.
Dice que desde hace meses asiste a la iglesia junto a su familia, y que nunca ha estado involucrado en ningún escándalo.